LA SAL MARINA

La Magia de la Sal Marina

Asezolé , Sal Marina, un Tesoro Ancestral y Artesanal de Celestún, Yucatán

La sal marina ha sido un elemento esencial en la historia de la humanidad, no solo como condimento sino también por sus propiedades beneficiosas para la salud.

Asezolé , se cosecha en la península de Yucatán, México, específicamente en Celestún, la vía de obtención de este valioso mineral se realiza de manera ancestral y artesanal, conservando tradiciones que se remontan a siglos atrás.

* Recolección de agua de mar: Se obtiene del mar del Golfo de México, en zonas donde las corrientes y mareas permiten una fácil extracción.

* Evaporación natural: El agua de mar se coloca en grandes charcas o salinas, construidas con técnicas ancestrales. Gracias a la acción del sol y el viento, el agua se evapora lentamente, concentrando la sal.

*Cuidado y mantenimiento: Durante la evaporación, los productores artesanales vigilan el proceso, asegurando que la sal cristalice de manera uniforme y que se eliminen impurezas.

* Cosecha manual: Una vez que la sal alcanza la cristalización adecuada, se recolecta a mano, preservando su pureza y calidad, aproximadamente 4 de la mañana, para que el sol no lastime tanto ojos y manos de los que la cosechan.

Asezolé, sal marina de Celestún, al ser obtenida de manera natural, conserva un perfil mineral completo que beneficia al organismo humano. Sus componentes principales incluyen:

- Cloruro de sodio (NaCl): Es el principal componente, esencial para mantener el equilibrio de líquidos y la función nerviosa.

- Minerales traza: Como magnesio, calcio, potasio, hierro, zinc y manganeso. Estos minerales son fundamentales para diversas funciones corporales, incluyendo la formación de huesos, la transmisión nerviosa y la regulación del metabolismo.

Su obtención, se realiza mediante métodos tradicionales que aprovechan la energía del sol y el viento, siendo su proceso el que a continuación te platico

Este método, respetuoso con el medio ambiente y con las tradiciones locales, produce una sal marina de calidad superior, rica en minerales y con un sabor único.

Asezolé, sal marina de Celestún, Yucatán, es mucho más que un condimento; es un legado ancestral que representa la unión entre la naturaleza y las tradiciones humanas. Su obtención artesanal y respetuosa con el medio ambiente garantiza un producto de alta calidad, lleno de minerales beneficiosos para la salud. Incorporar esta sal en nuestra dieta es una forma de valorar y preservar las prácticas tradicionales, además de disfrutar de un sabor auténtico y nutritivo. ¡Celebremos la riqueza de nuestra tierra a través de la sal marina de Celestún!